Saturday, March 24, 2012

Los muertos no hablan

Los muertos no hablan, los muertos no escriben, los muertos no llaman...

Esa ha sido mi filosofía en la última semana. He podido sobrevivir, he mantenido mi cabeza a flote pensando que te fuiste para no volver. Logré convencerme que dejaste de existir y no te pudiste despedir de mí como debía. Nos quedamos debiendo un último abrazo, un último beso, una última noche juntos... porque nunca supimos cual iba a ser la última.

Si la humanidad supiera cual es la última oportunidad que tiene de hacer algo haría de ella algo maravilloso, increíble e inolvidable.

Tu último cumpleaños juntos fue algo que celebramos de afán porque estabamos empacando maletas para irnos a NJ, nos despedimos de OH. Una cena sin preparación, un regalo mal empacado... una casa patas-arriba... algo de miedo.

Mi último cumpleaños juntos fue algo que no quiero recordar, lo pudimos hacer memorable pero la compañía que llegó no lo permitió. Te dije que no quería nada, que sólo te quería a tí, estar contigo, no necesitaba mas. Pero no fue posible porque había visita y teníamos que ser buenos anfitriones.

Nuestra última Navidad tampoco fue posible, con todo lo que teníamos que hacer no fué posible programar la cenita de Navidad con la que quería despedirme de tí antes de dejarte en el avión y empacarme después en el mío.

Recuerdas lo que te dije cuando te dejé en el aeropuerto? "No me dejes, por favor, no me dejes"... te asustaste. En ese momento ni siquiera yo misma supe por qué lo dije, ahora sé que en el fondo de mi corazón sabía que yo debía regresar a OH y tu te quedarías en NJ.
En realidad fué una súplica, no quería que me dejaras... y aún así lo hiciste.

Año Nuevo? tu en Portugal y yo en Colombia. Sólo recuerdo uno de tus mensajes: "que el 2012 nos dé paciencia y energía suficientes para estar juntos"... evidentemente no las necesitamos. El momento tan corto que compartimos este año lo único que tuvo fue desamor, histeria, peleas y rencores. La paciencia se fué por la ventana, y la energía nunca llegó.

Hoy me confirmaron un contrato por 10 semanas en la universidad, trabajando como asistonta de una señora que ayuda a los estudiantes a encontrar trabajo. De allí espero aprender y hacer contactos para mi propia búsqueda de trabajo.
Media hora después me llamaron para notificarme que el proyecto del Departamento de Transporte de Ohio para el cual me había postulado comenzará el 1o de Abril y yo estoy en nómina. Es un contrato de año y medio, ya tengo sueldo y beca aseguradas... no sabes la tranquilidad y la satisfacción que se siente recibir tantas buenas noticias.

Pero tampoco sabes la tristeza tan impresionante al sentir que no las puedo compartir contigo. Que no te puedo llamar a gritar por teléfono "Soy un geniooo!". Que no puedo decirte con una sonrisota de oreja a oreja que soy lo máximo, que me siento valiosa, que me siento en las nubes... que quiero que me abraces duro duro duro y nos vayamos a comer un helado para celebrar.

Hoy me haces falta, hoy quiero estar contigo, hoy quiero que me consientas y que me digas que estás orgulloso de mí, aunque yo ya estoy MUY orgullosa de mí misma.
Quiero que me hagas las preguntas más difíciles acerca de las ofertas laborales porque a mí no se me ocurrieron, quiero que me ayudes a prepararme mentalmente para el trabajo, que me enseñes a decir las cosas adecuadas, que me cuentes cómo metiste la pata tu en tu primer trabajo para que yo no lo haga igual... hoy quiero que estés junto a mí para apoyarme.

Será posible que sientas mi dolor? será posible que mis lágrimas viajen los 1,056 kilómetros que nos separan y esta noche sientas mis alegrías y mis tristezas?

A veces, me pongo a pensar si estás pensando en mí. Si te acuerdas de las cosas bonitas que vivimos juntos, de cómo nos reíamos de los demás, de los chistes tontos que sólo tu y yo entendemos...

Hoy es noche de tormenta aquí en Cincinnati. Estoy sola en el apartamento oyendo los truenos y las alarmas de tornado... estoy llorando, pero no es por miedo, es porque te extraño, porque quiero que estés aquí conmigo botado en el sofá viendo televisión debajo de una cobija, en el plan mas absurdamente tonto de todos.

Los muertos no hablan, pero ahora mismo quisiera que mi teléfono sonara y me dijeras que si mí te sientes igual que yo sin tí: un poquito muerto.

No comments:

Post a Comment